Allá por mayo después de una buena actuación en la media de San Sebastian marcamos como objetivo esta carrera, además nos la íbamos a plantear con un objetivo muy muy ambicioso, bajar de 3 horas, digamos que es la cifra mágica de los atletas populares. Mi marca por entonces (la misma que a día de hoy) no era nada del otro mundo (3:20) pero la marca de la media hacia pensar que era un objetivo que podíamos conseguir (1:22).
Descansamos bien la primera parte del verano y ya en Agosto empezamos un camino que sabíamos que iba a ser duro pero con ilusión y sacrificio podríamos lograr.
Esos meses de preparación fueron duros, días mejores, días peores... pero los entrenos se iban acumulando e íbamos cumpliendo las etapas marcadas según el plan previsto. Grandes entrenos a principios de octubre hicieron que empezará a creérmelo ya que mi objetivo real siempre había sido mejorar mi marca lo máximo posible y dejarla cerca de las 3 horas, pero empezaba a ver que quizás si que tenia a mi alcance poder lograrlo, como mínimo ya había sido capaz de planteármelo seriamente y empezar a visualizar el objetivo.
Un test de una media a un mes del maratón me puso los pies en la tierra, el maratón no son matemáticas e influyen muchos factores, y me vine abajo, por unos días mi cabeza dejo de creer pese a que toda la gente que estaba detrás de mi apoyándome me decía que estaba preparado no me lo creía y entonces me lesione.
Rotura si, rotura no, el caso es que en las ultimas 3 semanas había podido correr 45 km en total y me plantaba en el fin de semana del maratón con molestias aún en la zona del recto anterior. Una carrerita esa semana para probar la pierna me hizo ver que no estaba para correr y lo mejor que podía hacer era disfrutar el fin de semana y si podía ayudar a alguno de mis compañeros que corrían también.
Vivir un sábado con maratonianos no es la mejor manera de tomar una decisión de que hacer el domingo, como entenderéis muchos de los que me leáis sabéis que iba a pasar, efectivamente, me lié la manta a la cabeza y decidí salir hasta que el cuerpo aguantara sin forzar, sin presión... a disfrutar y vaya si disfrute.
Sin ninguna presión pero consciente de que no sabía que iba a pasar preparo todo como si fuera a disputarlo entero, porque una cosa tengo clara cuando se hace un maratón, si llegas al kilómetro 32 se acaba SI o SI.
El sábado contábamos con un poco de aire pero que el domingo ha desaparecido y se levanta en Valencia un día perfecto para correr, buena temperatura, humedad normal y prácticamente sin viento excepto en algunas zonas del recorrido. No había excusas, me convencí aún más de disfrutar lo que pudiera.
Fotos, despedida, baño de última hora y nos plantamos ya en la salida con una sensación rara, parecia que iba a salir a rodar un rato con 10.000 amigos. Salida puntual, primeros metros, la gente busca colocarse y empezar a coger ritmo, yo sin prisa y disfrutando intento molestar lo menos posible. La salida es lo suficientemente amplia para rápidamente en el km 2 ya haber encontrado un sitio cómodo donde ir rodando. Pequeñas molestias iniciales en la zona pero suponía que aún estaba frío.
Km 5 en 23 minutos, un pelin por encima de 4:30 pero rodando bien, mucho ambiente en los laterales y seguimos hacia el 10 donde clavo de nuevo el parcial al igual que en el 15.
Aquí ya empezamos con alguna molestia que estaba claro que no era por estar la zona aún fría. Voy bien, las piernas de momento responden y sigo alucinado con la cantidad de gente que hay en las calles, y como animan!!!!. Cojo al globo de 3:15 y me da un subidon, me meto en el grupo y ruedo varios km con ellos, pero no voy cómodo y decido coger de nuevo mi ritmo, que en ese momento era un pelin superior al suyo por lo que me empiezo a despegar de ellos poco a poco.
Mi entrenador que no daba un duro por mi después de su lapidaria frase del sábado, "si llegas al 25 te acompaño...." (es broma, se que era psicología inversa :) ) en teoría me esperaba pero al pasar por la zona y no ver a nadie supuse que había pasado mas rápido de lo que me esperaban (automotivación).
A partir del km 27-28 la molestia seguía siendo soportable pero la otra pierna daba síntomas de que mi carrera no iba fluida y se empezaba a cargar demasiado. Los km seguían cayendo y llegados al 30 tenía claro que cruzaría el arco de meta.
El ritmo no era tan fluido pero aún aguantaba bien, en el km 34 un subidón, Carlos y Felix se unen a mi durante unos 500m y me dan muchos ánimos y mucha fuerza para continuar, la meta cada vez esta más cerca.
Pero.... empezamos a notar las 3 semanas parado, el correr raro.... y la pierna derecha empieza a protestar, aductor, isquio, isquio, aductor.... así me paso jugando un rato hasta que dice basta y tengo que parar a estirar. Continuo la marcha buscando un ritmo que aguante y lo encuentro pero con el precio de forzar la lesión así que decido bajar el ritmo lo suficiente para llegar en buenas condiciones y que el problema no fuera a peor.
El público empieza a llevarte en volandas, 2-3 paradas después para estirar de nuevo (no sabía que el aductor se pudiera subir tan arriba) me planto en el 40 y eso es otro cantar, el publico hace un pasillo en el que a duras penas cabemos dos corredores en paralelo, coño parezco Fiz, no dejo de escuchar mi nombre en todo momento, se fueron los dolores, se fueron los calambres, joder por estos dos putos kilómetros os aseguro que ha merecido la pena sufrir estos últimos km.
Y llegamos, día soleado que hace que esos últimos 100 metros sean bonitos, muy bonitos y cruzo el arco una vez más y una vez más me doy cuenta de lo que supone un maratón, las caras de la gente, sus sonrisas, sus lagrimas..... Nos llaman locos pero no lo estamos y aunque lo estemos somos los locos más felices del mundo ahora mismo.
Y allí en la meta entre todos sobre sale una figura con pinta de gran atleta, coño el mister, si ese que no daba un duro por mi.... pero su reacción al verme me hizo ver que si que confiaba, me soltó un "coño Yuste que haces aquí", cabronazo jajajajajajaja.
Al final un tiempo de 3:22 ya que en la ultima parte se me fue mucho pero el tiempo era lo de menos, el objetivo era disfrutar y os aseguro que disfrute cada metro.
Ya en meta esperamos la llegada de los compis que debutaban en la distancia, rápidamente entro Charly, creo que todavía no se le ha quitado la sonrisa, después entro Juan y su cara era la cara del maraton, una mezcla de sufrimiento, orgullo, satisfacción, dolor..... lo tenía todo. A Antonio que repetía, tripitia o yo que se, es otro viejete de los maratones y no le vimos y nos faltaba Javi al que tampoco vimos llegar porque el frío empezaba hacer mella en mi cuerpo, pero entro y también consiguió su sueño. Enhorabuena a los 4 y especialmente a los 3 nuevos maratonianos.
Mención a parte tiene Alvaro ya que su carrera tenía una dedicatoria especial, enhorabuena y estará orgullo seguro.
Yo siento no haber podido cumplir mi objetivo sobre todo por toda la gente que tenía detrás apoyando durante todos estos meses, los hermanitos siempre pendientes, los chicos de Corre por ti siempre animando y empujando y especialmente Nacho y Antonio, sois muy grandes los dos pero Antonio ya no te espero más, el próximo cae.
Alberto gracias, vaya manos tienes y sobre todo gracias por tus valiosos consejos, sobre todo el de no hacer caso a Rober jajajajajajaja (verás las series que me van a caer por esto)
Roberto a ti no te digo na que ya lo sabes, gracias por creer en mi y estar siempre, bueno siempre siempre no, en el 25 no estabas :) Te debo esta marca así que cuenta con ella.
Vane otro que sin ti no hubiera sido posible, gracias, gracias, gracias.
Vaya rollazo que he soltado.
enhorabuena.-
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